Besos robados de Noelia Amarillo
Pero, claro, Cristina no era una mujer normal. Al contrario, era una complicada mezcla de claros y sombras en la que la realidad se confundía con la fantasía y las mentiras parecían ser verdad. Una mujer capaz de inventar el más imposible de los cuentos y convertir lo imposible en posible.
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