No lo llames pasión de Noelia Amarillo
-Y cuando tenga el pelo canoso, las tetas caídas y la piel arrugada, ¿seguirán faltándote las palabras al mirarme? -planteó burlona, recordándose a sí misma lo nefasto que era dejarse enamorar por un hombre que sólo te apreciara por tu belleza. -No necesito mirarte para que me falten las palabras y el aliento, pero si quieres saberlo, la respuesta es sí. Da igual los años que pasen, seguiré enmudeciendo ante ti, porque para mi siempre serás tan hermosa como lo eres ahora -afirmó impidiendo que la parte baja de su cuerpo la tocara, remiso a violentarla con la evidencia de su deseo. |