Agujeros de Sol de Nieves Mories
Ser hoja y ser rama, ser flor y ser hierba. Y seguir recordando, sin oír, sin ver, sin hablar, solo meciéndose al viento para siempre.
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Agujeros de Sol de Nieves Mories
Ser hoja y ser rama, ser flor y ser hierba. Y seguir recordando, sin oír, sin ver, sin hablar, solo meciéndose al viento para siempre.
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Todas las chicas descalzas de Nieves Mories
Nadie volvería a oírme. Nadie llegaría a sentirme. Nadie podría verme. Siempre sería la chica invisible. La que vivió y murió sin hacer mucho ruido. Un fantasma en vida, igual que en la muerte. |
Todas las chicas descalzas de Nieves Mories
Papá adoraba a May, igual que lo hacía yo. Todo el mundo quería a May, no solo nosotros. Como el que quiere un pedazo de tarta de manzana que se airea al sol; por eso intentaron devorarla. |
Todas las chicas descalzas de Nieves Mories
Quizá lo recuerdes o quizá no. El último día que salté desde las colosales rocas para marcharme con el río.
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La chica descalza en la colina de los arándanos de Nieves Mories
El tono del policía es paternal, condescendiente. Golpea rítmicamente la libreta con el bolígrafo, pero no apunta nada. […] Ha ido allí porque no le queda más remedio, porque tiene un papel que representar, pero todas las preguntas que le hará, ya han sido respondidas de antemano.
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La chica descalza en la colina de los arándanos de Nieves Mories
Se habla mucho de acoso en las aulas, parece que no hay día en el que no haya una noticia al respecto, pero solo puedo decir que no es nada nuevo bajo el sol. La vida transcurre así desde siempre y solo nos llevamos las manos a la cabeza cuando sucede en otro lugar, cuando le pasa a gente desconocida a la que solo ves a través de la pantalla del televisor. Si las cosas se ponen feas para los chicos al otro lado de la calle, la solución consiste en correr las cortinas para no verlo e ignorarlo hasta que mañana sea otro día. Es fácil hacerse el sordo cuando el vecino empieza a gritar. |
La chica descalza en la colina de los arándanos de Nieves Mories
El primero me lo pasé acurrucada en un rincón, junto a la puerta, sin saber qué hacer. No te dan un manual de instrucciones cuando regresas del otro lado, o cuando no te vas, o qué sé yo cómo definir esta situación tan rara. Esto no es una película de Tim Burton.
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La chica descalza en la colina de los arándanos de Nieves Mories
No tengo mucho que decir acerca del hecho de morirse. Nunca pensé demasiado en eso. En el momento exacto en el que uno va y la palma. Creo que, como a todos, me interesaba más, si es que alguna vez me lo planteé en serio, lo que ocurriría una vez pasas al otro lado, por decirlo de algún modo.
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La chica descalza en la colina de los arándanos de Nieves Mories
Siempre sería la chica invisible. La que vivió y murió sin hacer mucho ruido. Un fantasma en vida, igual que en la muerte.
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La chica descalza en la colina de los arándanos de Nieves Mories
Nadie volvería a oírme. Nadie llegaría a sentirme. Nadie podría verme. |
Agujeros de Sol de Nieves Mories
Es guapa, ¿verdad? La mujer sentada en la butaca Chester, a esa me refiero. No, la otra no. La que aún se mueve.
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Agujeros de Sol de Nieves Mories
—Lo había olvidado. Lo había olvidado… Olvidó lo que se sentía cuando aún la trataban como a una persona. |
Agujeros de Sol de Nieves Mories
Puede que todos los que están en esta casa tengan su trocito reservado en la tarta de la culpabilidad. La vida no es tan sencilla como una partida de Cluedo; la Señorita Amapola con el candelabro en el garaje no suele ser la única responsable de todas las calamidades.
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Asuntos de muertos de Nieves Mories
Nunca se irían, no, porque las cosas que no existen no pueden desvanecerse. Lo que ya está muerto no puede volver a morir. Las cenizas no pueden volver a arder.
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Asuntos de muertos de Nieves Mories
Vivíamos del miedo, comíamos del miedo. Los Asuntos de Muertos eran un negocio muy lucrativo, no iba a negarlo, pero requerían estómago y falta de escrúpulos y yo, esa noche, no podía hacerlo, ni siquiera como demostración.
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Asuntos de muertos de Nieves Mories
Yo también lo llevaba escrito hasta en los huesos y lo llevaría toda la vida. Nosotros no sabemos perdonar. Nosotros no sabemos olvidar. Así había sido siempre. Así seguiría siendo.
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La chica descalza en la colina de los arándanos de Nieves Mories
—Sí, Nick, escúchame. Compréndeme. Necesito paz, redención y que pongas bombillas nuevas.
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La chica descalza en la colina de los arándanos de Nieves Mories
Creo que la influencia del cine es demasiado grande y no te la quitas de encima ni post mortem.
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La chica descalza en la colina de los arándanos de Nieves Mories
No soy más que una cáscara hueca y rota. No soy más que un reloj sin pilas.
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Gregorio Samsa es un ...