Siega de Neal Shusterman
Nos miramos en el espejo y vemos un rostro que apenas reconocemos y que nos suplica que reiniciemos el contador y seamos jóvenes de nuevo. Sin embargo, ¿somos de verdad jóvenes una vez que reiniciamos el contador? |
Siega de Neal Shusterman
Nos miramos en el espejo y vemos un rostro que apenas reconocemos y que nos suplica que reiniciemos el contador y seamos jóvenes de nuevo. Sin embargo, ¿somos de verdad jóvenes una vez que reiniciamos el contador? |