![]() |
Los fasificadores de pimienta de Monika Sznajderman
O sea que, fuera de las excepciones que se hacían en el caso de "los nuestros" el mundo judío no existía para la nobleza rural polaca. Y, si existía, sólo era una parte de su mundo: una parte imprescindible sólo de vez en cuando, y atractiva por su exotismo sólo de vez en cuando. Jamás igual, siempre peor, siempre sumisa, nunca digna de un interés verdadero, y solamente a ratos necesitada de los cuidados y de la protección de los señores.
|