El acuerdo de Melanie Moreland
Nos quedamos de pie, mirándonos. Empece a andar hacia ella con pasos lentos y calculados hasta que estuve a escasos centímetros de su cuerpo. De cerca parecía tan destrozada como yo me sentía. esos ojos azules estaban enrojecidos y me miraban con recelo. estaba mas blanca que nunca y tenia el pelo lacio y sin brillo.
|