Oasis de arena de Mayte Esteban
Navego en un desierto infinito de arenas revueltas donde no atisbo más paz que la de este arenero del parque, un lugar en el que, durante un tiempo, no me veo obligada a esconderme para no ahogarme.
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Oasis de arena de Mayte Esteban
Navego en un desierto infinito de arenas revueltas donde no atisbo más paz que la de este arenero del parque, un lugar en el que, durante un tiempo, no me veo obligada a esconderme para no ahogarme.
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BRIANDA: Una bruja en tiempos de la Inquisición de Mayte Esteban
-Hay fronteras que Oli me enseñó que nunca deben rebasarse, aquellas que tienen que ver con la vida y la muerte, o esas que provocan daños irreversibles en las almas de los demás. La magia es un don poderoso que deberíamos cuidar y mantener, pero siempre teniendo claro que no debemos obrar al servicio del mal. Sin embargo, es fácil dejarse arrastrar por ese lado oscuro. Y de él nunca se regresa porque se transforma. Una vez que se aprende a doblegar a la naturaleza para que actúe a tu conveniencia es imposible resistirse.
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Doce horas de Mayte Esteban
A los únicos que me dejo fuera de mis aplausos es a los que se saltan la cuarentena porque están cansados de estar en casa...
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DESEOS DE MEDIANOCHE de Mayte Esteban
Cuando la vida te pone enfrente a alguien que te hace sentir asi, no puedes dejarlo pasar.
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Entre puntos suspensivos de Mayte Esteban
Desnudar el alma provoca mucho más pudor que desnudar el cuerpo.
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Entre puntos suspensivos de Mayte Esteban
Hay personas a las que se les da bien decir las cosas sin palabras.
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BRIANDA: Una bruja en tiempos de la Inquisición de Mayte Esteban
Un niño de origen humilde siempre aprende que llorar no sirve de nada
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La colina del almendro de Mayte Esteban
Es fácil soñar cuando la vida te sonríe. Lo complicado es seguir soñando cuando todo va mal
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DESEOS DE MEDIANOCHE de Mayte Esteban
Cuando las luces se apagan, se recogen los adornos, la ropa se deshace de las lentejuelas y el maquillaje de purpurina, cuando la Navidad se desvanece, queda lo mejor. Los lazos que nos atan al corazón de las personas que amamos. |
Entre puntos suspensivos de Mayte Esteban
El pasado no se puede cambiar, pero podemos intentar entender qué hicimos mal y no repetirlo en bucle.
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La colina del almendro de Mayte Esteban
El sendero de entrada de Almond Hill me recuerda que la vida es también camino, un puñado de elecciones que vamos haciendo. Las malas y las buenas nos llevan a nuestro destino y en ellas siempre hay algo que se pierde y algo que se gana. Y, por fortuna, algo que se aprende.
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La colina del almendro de Mayte Esteban
...la noche es larga y oscura cuando tienes cuentas pendientes con la vida.
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La colina del almendro de Mayte Esteban
Es fácil soñar cuando la vida te sonríe. Lo complicado es seguir soñando cuando todo va mal -dijo James-. Uno se pierde si deja de soñar -le había contestado. |
La colina del almendro de Mayte Esteban
Ellos, desde sus despachos, con su té caliente y su comida preparada en una cocina y no entre el barro, solo jugarán a poner banderitas sobre un mapa y a planear estrategias para que seamos otros los que sintamos las balas o el olor de la podredumbre de la muerte. Ellos no son los que llegan aquí como reses al matadero. Un matadero en el que somos a la vez víctimas y verdugos, en un sinsentido de odio que no alcanzo a comprender.
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La colina del almendro de Mayte Esteban
Durante un instante recordó que a veces la vida te deja sonreír todo el tiempo.
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La colina del almendro de Mayte Esteban
Muchas veces lo que se calla reaparece en la vida, golpeando en un dolor que parecía que el tiempo se había llevado con él.
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La colina del almendro de Mayte Esteban
Las pasiones movían unas conciencias dudosamente informadas que embriagaban enseguida con frases grandilocuentes.
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La colina del almendro de Mayte Esteban
No sabían que la vida no da treguas cuando las necesitas, por mucho que te empeñes en convencerte de lo contrario.
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La colina del almendro de Mayte Esteban
...solo vivimos una vez. Deberíamos hacerlo de acuerdo con nosotros mismos.
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La guerra del fin...