El único hombre vivo de Mario Gómez Giménez
Pero entonces, cuando me miró. Me acojoné. Parecía una película de terror. Los muertos volvían a la vida y no sabía qué hacer ni qué pensar.
|
El único hombre vivo de Mario Gómez Giménez
Pero entonces, cuando me miró. Me acojoné. Parecía una película de terror. Los muertos volvían a la vida y no sabía qué hacer ni qué pensar.
|