Cuentos de Navidad de Luján Fraix
¿Cómo se puede ser tan feliz encerrado entre cuatro paredes escribiendo mentiras? Diría Rosa Montero; es que el arte salva vidas.
|
Calificación promedio: 5 (sobre 4 calificaciones)
/
Cuentos de Navidad de Luján Fraix
¿Cómo se puede ser tan feliz encerrado entre cuatro paredes escribiendo mentiras? Diría Rosa Montero; es que el arte salva vidas.
|
La Liberación: Hermanas Brontë de Luján Fraix
Haz tu trabajo lo mejor que puedas y supérate a ti misma, sin competir y sin mirar al costado. Y si fracasas, tómalo como una experiencia, aprendizaje, para intentarlo de nuevo por otra vía, con más elementos, con otros, y con la sabiduría que da el tiempo.
|
Los días semejantes: Por los caminos de agua... de Luján Fraix
Pensó que eso era la muerte y se desilusionó… No la imaginaba así sino como algo bello por donde se podría deslizar su cuerpo liviano y etéreo, un pájaro de alas enormes que se enfrentaba al viento y a las borrascas, que podía desafiar a una naturaleza enemiga y a los sueños más deseados. Ver a otros seres en la infinitud, rozarlos con la punta de los dedos o abrazarlos con la energía de las llamas: madre, padre, tíos, hermanos… ¿hijos? |
Puerto soledad: La guerra de Malvinas-1982- de Luján Fraix
Emilio tenía coraje. Lo había demostrado en el campo de batalla cuando las fuerzas eran limitadas; lo obligaban a cerrar los ojos y a caminar contra la corriente. Y hacía frío y el hielo estaba dentro del cuerpo y lo paralizaba, pero sabía, muy en el fondo, que debía sobrevivir, que tenía que resistir... Tal vez, otro destino lo esperaba más allá de las bengalas y de los fusiles que no sabía manejar, quizá algún día tendría que pasar la página y escribir otra ficción para seguir resistiendo los embates de las batallas siguientes. De eso se trata la vida... de resistir, de encontrar lápiz para escribir un destino nuevo cada día. |
Cuentos de Navidad de Luján Fraix
¡Vive tu propia Navidad! No importa cómo… Solo, con un amigo, con tu perro o tu gato, leyendo un libro, con tus padres ancianos, de viaje, con tu hijo, en pareja… La verdadera esencia vive dentro tuyo. |
Buenas y Santas...: Los hijos olvidados de Luján Fraix
La casa de la abuela se mantenía en pie junto a la iglesia de Santa Rita. Frente a las vías muertas del ferrocarril, los niños pobres caminaban entre los tachos y los perros. El cafetín donde Mariano Pelayo solía pasar jornadas enteras bebiendo ron, la estación, las avenidas de tierra que se unían a la llanura donde el sueño se hacía pampa… aguardaban la noche para ver las estrellas al alcance de sus recodos. Felicitas sentía la orfandad más que nunca. Era polvo arremolinado por el devenir como su hija en brazos de otra persona, sin padre. |
Licia Hermana mía: La Revolución francesa-1790- de Luján Fraix
Veía a las mujeres elegantes con los peinados iluminados con harina de arroz y las mantas de paño sobre los hombros y pensaba en lo injusta que era la vida. De pronto, en un portal vio algo que se movía… Entre la vasta línea de los bancos, ciertos caballeros fumaban en pipa de arcilla y en la esquina había dos columnas llenas de carteles que semejaban trajes de arlequín por sus cuadros de varios matices.
|
La nodriza esclava: Dinastía Tudor -1510- de Luján Fraix
Aquella ausencia de carruajes, de risas infantiles, de copos de nieve y querubines, del rey y sus borlas doradas, de los escribientes y las gitanas… la dejó inerme, contra una pared de formas inquietantes pero sin voces. El mutismo lleno de memoria le recordaba la soledad y la quietud era una mortaja de condenado. Nunca creyó que iba a tener que vivir sin ellos. In Pace. |
Los siete dones: Ella eligió perdonar... de Luján Fraix
Libre de remordimientos y de pesares, el hombre gozaba de su carácter posesivo y creía tener el dominio de sus actos. No pensaba en los otros y qué podían necesitar, era ciego y sordo a los sentimientos ajenos. La humildad no era su baluarte.
|
Cuentos de Navidad de Luján Fraix
Después de la pandemia, la Navidad, para muchos será por siempre en blanco y negro.
|
La guerra del fin...