Tantos lobos de Lorenzo Silva
Nadie escucha. Nadie entiende. A nadie le interesa..... ...en aquellas demoledoras palabras de Thais sentí que quedaba sentenciado todo lo que de veras importaba: por qué y en qué forma en el mundo en que vivíamos podían arruinarse de golpe y para siempre dos vidas, sin que nadie acertara a impedirlo, antes de cumplir los dieciséis. |