Los Makenzie - Edición Especial de Linda Howard
Lecciones privadas: Ella era solo una magnolia recien trasplantada a la que le estaba costando aclimatarse |
Los Makenzie - Edición Especial de Linda Howard
Lecciones privadas: Ella era solo una magnolia recien trasplantada a la que le estaba costando aclimatarse |
Los Makenzie - Edición Especial de Linda Howard
Lecciones privadas: Hacia tanto frio que los adultos no podian desvestirse para engendrar niños. |
Los Makenzie - Edición Especial de Linda Howard
Lecciones privadas: Era una solterona. Ahora tenia un gato. Y llevaba serios zapatos de solterona. El cuadro estaba completo. |
Los Makenzie - Edición Especial de Linda Howard
Lecciones privadas: Dieciseis años eran muy pocos para cometer un error que lo perseguiria de por vida. |
Los Makenzie - Edición Especial de Linda Howard
Lecciones privadas: Su rostro permanecia impasible, pero su sexo palpitaba dolorosamente. Necesitaba una mujer. |
Los Makenzie - Edición Especial de Linda Howard
Lecciones privadas: Por sus venas corría la sangre de dos de los pueblos mas beliciosos de la historia. [...] Era un guerrero nato, y en el Ejercito se dieron cuenta de ello nada mas alistarse. |
No te dejaré atrás de Linda Howard
—Nada de Babe. No me gusta —dijo—. Me gusta Granda, o Asesina, o algo así. |
No te dejaré atrás de Linda Howard
Tan sólo con estar cerca de ella, el aire se llenaba de electricidad.
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No te dejaré atrás de Linda Howard
—Si alguna vez tengo que elegir entre mis hombres y tú, voy a elegir siempre a mis hombres. No creas que voy a saltar delante de una bala para salvarte solo porque seas mujer. —Muy bien, entendido —dijo ella—. No valgo nada. |
No te dejaré atrás de Linda Howard
—Un momento —dijo, y arrastró la piedra hacia si con un pie. —¿Qué estás haciendo? —Tomar una piedra. La necesito. —No tires... —Voy a subirme en ella —le espetó Jina, con tirantez—. No seas tonto. |
No te dejaré atrás de Linda Howard
—¿Qué es el entrenamiento en suelo? Jelly sonrió. sin embargo, ella no confiaba en absoluto en aquella sonrisas. —Es el entrenamiento en el que te enseñamos a no espachurrarte contra el suelo. |
No te dejaré atrás de Linda Howard
No sabía cuánto tiempo más tenían pensando quedarse los solteros, pero ella no tendría ningún reparo en echarlos. Les había dado de cenar, les había dado cerveza y había cumplido con sus obligaciones sociales. |
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