El sí de las niñas de Leandro Fernández de Moratín
DOÑA IRENE.- ¿Puedo hablar ya, señor? DON DIEGO.- Ella, ella debe hablar, y sin apuntador y sin intérprete. DOÑA IRENE.- Cuando yo se lo mande. DON DIEGO.- Pues ya puede usted mandárselo, porque a ella la toca responder... Con ella he de casarme, con usted no. |