Gritos antes de morir de Lara Falcó
Esa fue la primera vez que Tom lo vio. Era un libro antiguo, de piel repujada y más de seiscientas páginas que amarilleaban por los extremos. Fue tanta la insistencia del dependiente que Tom accedió a darle un vistazo. Nada más tenerlo entre sus manos pudo observar algo que le inquietó bastante. En la cubierta, grabado a fuego, se podía leer el siguiente título: Historia de Tom Abnett. |