Eternamente Vos de Karen M. Zárate
Caminó de un lado a otro en ese diminuto espacio que, contradictoriamente, no era de acabarse jamás. Comenzaba a ahogarse porque, desde donde se encontraba, nada le resultaba familiar.
|
Eternamente Vos de Karen M. Zárate
Caminó de un lado a otro en ese diminuto espacio que, contradictoriamente, no era de acabarse jamás. Comenzaba a ahogarse porque, desde donde se encontraba, nada le resultaba familiar.
|