La perla de John Steinbeck
Él había dicho “soy un hombre”, y eso significaba determinadas cosas para Juana. Significaba que era mitad loco y mitad dios. Significaba que Kino se lanzaría con toda su fuerza contra una montaña y se sumergiría con toda su fuerza en lucha con el mar. Juana, en su alma de mujer, sabía que la montaña permanecería impasible y el hombre, en cambio, se destrozaría; que el mar se agitaría y el hombre, en cambio, se ahogaría.
|