Tan cerca del horizonte de Jessica Koch
Poco a poco empezaba a sentirme a gusto en este apartamento. Los dos hacían que tuviera la sensación de estar en casa. a nadie le molestaban los jadeos de mi perra ni sus patas sucias. Nadie hacía preguntas y no había miradas de reproche. Aquí nada era un problema. De repente deseé ser una de ellos. |