¿Quién mató a Alex? de Janeth G. S.
Recuerdo que no lloró aquel día, ni el siguiente, ni el otro, ni una semana después. Nunca lloró delante de mí. Con el tiempo comprendí por qué lo hizo. No quería mostrarse débil y vulnerable ante los demás. Quería ser fuerte delante de su hija, una niña que todavía no sabía nada de las leyes de la vida. |