Amante Desatado de J.R. Ward
Hubo una corta pausa y luego él... ¡Por Dios!... Le sonrió. Por debajo de la perilla, los extremos de sus labios se curvaron hacia arriba y arrugó los ojos.
|
Amante Desatado de J.R. Ward
Hubo una corta pausa y luego él... ¡Por Dios!... Le sonrió. Por debajo de la perilla, los extremos de sus labios se curvaron hacia arriba y arrugó los ojos.
|