El festín de la vida de J. Ryan Stradal
"Fue inevitable: cuando Cynthia salió de la cocina ya se había enamorado de ella, pero el amor, como siempre, le provocó una sensación de tristeza y desventura. Lo que no sabía era que ella había pasado la última década sufriendo por culpa de hombres modernos alérgicos al compromiso, y que la bondad de Lars, pero sobre todo el entusiasmo efusivo y manifiesto que mostraba hacia ella, era exactamente lo que en aquel momento buscaba."
|