Y eran una sola sombra de Isabel-Cristina Arenas Sepúlveda
Desde antes de enfermarse a ella no le gustaba el atardecer, esa luz indefinida y maligna le daba escalofríos, le producía afán por terminar lo que fuera que estuviera haciendo
|
Y eran una sola sombra de Isabel-Cristina Arenas Sepúlveda
Desde antes de enfermarse a ella no le gustaba el atardecer, esa luz indefinida y maligna le daba escalofríos, le producía afán por terminar lo que fuera que estuviera haciendo
|