Diario del asco de Isabel Bono
Qué asco el miedo. Quiero pensar que lo único que consiguió mi hermano, siendo como era, fue darse asco. Yo también siento asco, por mí, por todo, pero aquí sigo. Y me pregunto si solo sigo aquí para llegar a entender algo, como un científico que siguiera en la selva sin curiosidad, solo porque no sabe dónde ir (página 49). |