El Ocaso Mexica: Moctezuma Xocoyotzin de Iñaki Sainz de Murieta
No hay ceremonia sin ritual. Ni ofrenda sin sacrificio. |
Comencé a realizar guiones para cómic hace tres años, casi espontáneamente, como un reto personal. Boceté dos, de temática muy dispar, y en ese momento me surgió la posibilidad de lanzarme en este precioso y ambicioso proyecto de la mano de la editorial Verbum. Cuando Luis Rafael me lo propuso, no dudé ni un momento en aceptar.
Ambas facetas forman parte de mí y me gusta que converjan siempre que es posible. La documentación es una tarea fundamental en según qué proyectos y eso me permite ampliar mi horizonte y mi base de conocimientos. En cierto modo, la literatura me permite acercarme a realidades que de otro modo me sería imposible vivir, pero para eso hay que comprender la cultura con la que están vestidos los individuos que conforman la sociedad. Ahí entra la antropología, como ciencia que permite comprender el constructo cultural del que debe estar imbuida una historia.
No es mi pretensión ni me deseo revertir la historia, sino aportar un contexto histórico, social y cultural que permita una reflexión posterior de todos cuantos quieran profundizar en la historia iberoamericana. De hecho, la idea es complementar este cómic con otro que signifique la visión de Hernán Cortés. No pretendo sentar cátedra, al revés, espero que gracias a esto salgan adelante más estudios y proyectos de investigación.
Trabajar con Miguel es un lujo. Llevamos colaborando en distintos proyectos varios años y la relación es muy fluida. Además, él tiene una experiencia dilatadísima en el mundo del cómic y sabe elegir siempre la mejor opción. En muchos casos basta con aportarle un poco de documentación visual para que obre su magia. No menos importante es que ambos somos donostiarras, lo que implica mucha proximidad, lo que siempre es de agradecer para cualquier tipo de trabajo. A veces se solucionan en cinco minutos determinados detalles que por correo electrónico o por teléfono te llevan horas. Eso simplifica mucho el trabajo.
A base de lectura, más lectura y mucha más lectura. La documentación es clave para llegar a atisbar un mínimo conocimiento de la cultura nahua, al igual que cuando se acomete el estudio de cualquier otra sociedad. Hay que saber seleccionar las fuentes y acudir a voces autorizadas. Es posible que haya cometido errores, o que las ilustraciones no reflejen con detalle la realidad del pueblo tenochca, pero esfuerzo e intención no han faltado. Espero que el pueblo mexicano sea comprensivo y lo valore adecuadamente.
Más allá de entretener, mi única pretensión es servir de acicate para que se siga investigando la historia iberoamericana. Es cierto que subyace una crítica a la institución del estado como entidad política que nace de la estratificación social y el ejercicio de la violencia, pero no es una crítica hacia la historia mexica, sino hacia el ejercicio del poder en general.
Además de ser una necesidad que trasciende los límites de la psique, es un concepto básico en el surgimiento de la humanidad. De hecho, es la frontera simbólica que nos permite valorar a nuestros ancestros como seres humanos, más allá de pertenecer o no al linaje sapiens. El primer testimonio simbólico de la humanidad es un enterramiento. No es casualidad. Lamentablemente, en mi opinión, nuestra sociedad ha optado por el camino del sufrimiento invisible. Se pretende arrinconar a la muerte, escondiéndola bajo un pesado manto de legalidad y burocracia, impidiendo el correcto desarrollo del duelo. No me gusta. Es un espacio en el que la libertad y la voluntad de los afectados no tiene lugar
Se mostrarían indignados, por cuanto que los humanos hemos antepuesto nuestros deseos egoístas a cualquier otra consideración.
Tengo varios entre manos. Ahora mismo estoy terminando un libro basado en tradiciones y leyendas vascas, pero al que he querido darle un importante componente narrativo. Ya le queda poquito. Ojalá que pueda salir este año. Aprovechando el confinamiento también he aprovechado para acometer el sexto volumen de la colección juvenil Las aventuras de Kanide, que va muy avanzado. También, he comenzado a esbozar el guion de la segunda parte del cómic El ocaso mexica, centrado en la figura de Hernán Cortés.
Siempre me ha gustado escribir, desde que era pequeño. Supongo que no hubo una obra que ejerciese dentro de mí ese primer impulso que me moviese a ello, puesto que no lo recuerdo. Ojalá pudiera decir lo contrario.
Sin duda, Los miserables de Víctor Hugo. Ninguna obra me ha conmovido tanto.
No tengo un libro de cabecera como tal. Sí que suelo leer cuantos libros de mitos y leyendas caen en mis manos, lo que con el tiempo lleva a leer los mismos mitos y leyendas una y otra vez. Es curioso ver cómo leyendas que creemos como propias se repiten en la lejana Siberia.
Vergüenza, ninguna. Hay muchos grandes clásicos que aún no he leído, como por ejemplo Las mil y una noches , aunque la compré este mismo año. Tengo muchas ganas de leer algunos, pero ahora estoy centrado en documentarme para otros proyectos que estoy desarrollando. No tengo tiempo para todo, aunque ahora con el confinamiento me estoy poniendo más al día.
Hace poco me hice con Neandertal , de Roudier. Me parece una obra muy interesante.
«Nunca estoy más acompañado que cuando estoy solo», de Publio Escipión.
Ahora mismo estoy terminando el libro Crónica de la eternidad: ¿Quién escribió la Historia verdadera de la conquista de Nueva España?, de Christian Duverger. Todo un descubrimiento.
El Ocaso Mexica: Moctezuma Xocoyotzin de Iñaki Sainz de Murieta
No hay ceremonia sin ritual. Ni ofrenda sin sacrificio. |
El Ocaso Mexica: Moctezuma Xocoyotzin de Iñaki Sainz de Murieta
Por otro lado, tan importante como la preparación física era nuestra formación espiritual.
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Gregorio Samsa es un ...