La fábrica de avispas de Iain M. Banks
Una muerte siempre es emocionante, siempre te hace darte cuenta de lo vivo que estás, tan vulnerable pero tan afortunado; pero la muerte de alguien cercano te da una buena excusa para volverte un poco loco por un tiempo y hacer cosas que de otra manera serían inexcusables. ¡Qué placer comportarse realmente mal y aun así recibir tanta comprensión!
|