El olvido que seremos de Héctor Abad Faciolince
Casi siempre pasa igual:cuando la felicidad nos toca es cuando menos nos damos cuenta que somos felices,y tal vez las alturas nos mandan nuestra buena dosis de dolor para que aprendamos a ser agradecidos(...)porque mientras la felicidad nos parece algo natural y merecido, las tragedias nos parecen algo enviado desde afuera,como una venganza o un castigo decretado por potencias malignas... Tal vez por esa experiencia en que la dicha se teñia de repente de dolor,yo ya debía de haber entendido,repito,que nuestra felicidad esta siempre en un equilibrio peligroso,inestable,a punto de resbalar por un precipicio de desolación. |