Loa a la tierra. Un viaje al jardín de Han Byung-Chul
Del manzano deshojado colgaba aún una manzana arrugada. No la había visto hasta hoy y me quedé asombrado. Brillaba amarilla en la noche. Es un regalo, e incluso una alabanza de la tierra, la solitaria manzana invernal. Resplandecía redimiendo la desangelada noche de invierno como si fuera el reflejo de una luz metafísica, de lo bello, que al mismo tiempo representa lo bueno.
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