Intramuros: La novela de Ferrara de Giorgio Bassani
¿A dónde va uno, todavía hoy, cuando desea hablar con alguien un poco a solas? En primer lugar a piazza della Certosa. Si la cosa va por buen camino, será cosa de nada llegarse luego hasta las murallas, donde hay tantos lugares como uno quiera, mientras que si, por el contrario, el idilio no progresa, resultará igualmente cómoda y al tiempo para nada comprometedora la vuelta en compañía hacia el centro de la ciudad. Se trata de una vieja costumbre, una especie de ritual, tan antiguo como la misma Ferrara. Estaba vigente antes de la guerra, lo está hoy y lo seguirá estando también mañana
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