Poesías de Giacomo Leopardi
De todo goce viudo, triste, mas no turbado, y aún plácido mi estado, no se alteró mi faz. Hubiera ansiado el término de la existencia mía, más nada ya podía mi pecho desear. |
Poesías de Giacomo Leopardi
De todo goce viudo, triste, mas no turbado, y aún plácido mi estado, no se alteró mi faz. Hubiera ansiado el término de la existencia mía, más nada ya podía mi pecho desear. |