Aforismos de Franz Kafka
El amor sensual hace perder la vista al amor celestial; él solo no podría, pero como tiene en sí inconscientemente el elemento del amor celestial, sí puede.
|
Aforismos de Franz Kafka
El amor sensual hace perder la vista al amor celestial; él solo no podría, pero como tiene en sí inconscientemente el elemento del amor celestial, sí puede.
|
La metamorfosis de Franz Kafka
Hacía ya rato que había terminado con todo y permanecía tendido en el lugar, por pereza, cuando la hermana hizo girar lentamente la llave, para hacerle saber que debía retirarse.> |
La condena de Franz Kafka
Lo cierto es que fuiste un niño inocente. Pero aún más ciertamente fuiste un hombre diabólico.
|
La metamorfosis de Franz Kafka
Reflexionar serena, muy serenamente, es mejor que tomar decisiones desesperadas.
|
El proceso de Franz Kafka
Para el sospechoso, le es mejor el movimiento que el descanso, ya que el que descansa puede estar en el plato de una balanza, y le pueden pesar con sus pecados.
|
Carta al padre de Franz Kafka
Es como alguien a quien van a ahorcar. Si lo ahorcan de verdad, ha muerto y todo ha terminado. Pero si tiene que ver todos los preliminares del ahorcamiento y sólo cuando le cuelga la soga delante de la cara se entera del indulto, puede que quede dañado para toda la vida.
|
Carta al padre de Franz Kafka
Así habla mi padre de mi amigo (al que no conoce) sólo porque es mi amigo. Esto siempre se lo echaré en cara cuando me haga reproches por mi falta de gratitud y de amor filial
|
Carta al padre de Franz Kafka
Tú sólo puedes tratar a un niño de la manera como estás hecho tú mismo, con fuerza, ruido e iracundia, lo que en este caso te pareció además muy adecuado, porque querías hacer de mí un chico fuerte y valeroso.
|
Carta al padre de Franz Kafka
También podía suceder que no tuvieses opinion respecto a un tema y, en tal caso, todas las opiniones posibles a ese respecto eran, sin excepción, erróneas.
|
Carta al padre de Franz Kafka
Pero aparte de que a la edad que tengo ya soy casi insensible a los estímulos, de qué me iban a servir, si solo llegan cuando no se trata de mí en primer término.
|
El proceso de Franz Kafka
-Pero yo no soy culpable -dijo K-. Es un error. ¿Cómo puede ser un hombre culpable, así, sin más? Todos somos seres humanos, tanto el uno como el otro. -Eso es cierto -dijo el sacerdote-, pero así suelen hablar los culpables.
|
El proceso de Franz Kafka
No debes fiarte tanto de las opiniones. La escritura es invariable, y las opiniones, con frecuencia, sólo son expresión de la desesperación causada por este hecho.
|
El proceso de Franz Kafka
Es propio de este tipo de justicia que uno sea condenado no sólo inocente, sino también ignorante.
|
El proceso de Franz Kafka
La sentencia no se pronuncia de una vez, el procedimiento se va convirtiendo lentamente en sentencia.
|
Carta al padre de Franz Kafka
te encontrabas enteramente absorto en el negocio, te dejabas ver sólo una vez al día
|
Aforismos de Franz Kafka
Después de la muerte de una persona, se produce, incluso en el mundo terrenal, un singular silencio bienhechor en lo que respecta al muerto. por fin ha cesado aquella fiebre terrenal, no se ve ya continuar aquella muerte, parece que se ha subsanado un error, es incluso para los vivos una oportunidad para tomar aliento, por todo lo cual también se abren las ventanas de la habitación del muerto, hasta que se descubre que todo es apariencia y empiezan el dolor y los lamentos.
|
Aforismos de Franz Kafka
Un primer signo de que empieza el conocimiento es el deseo de morir. Esta vida parece insoportable, y la otra inalcanzable. Ya no se avergüenza uno de querer morir; desde la vieja celda odiada, uno ruega que lo trasladen a una nueva que con el tiempo también llegará a odiar. Y en esto desempeña cierto papel el residuo de fe que le queda en que durante el traslado el señor pase casualmente por el pasillo y, mirando al prisionero, diga: "A este no volváis a encerrarlo. Se viene conmigo".
|
Aforismos de Franz Kafka
Una perra apestosa, gran paridora, en algunas partes ya podrida, pero que en mi infancia lo era todo para mí, que me sigue fielmente a todas partes, a la que no puedo evitar pegar, pero ante la que yo mismo, temiendo su aliento, me echo atrás paso a paso, y que sin embargo, si no tomo otra decisión, me acorralará en el rincón ya visible de la pared, para descomponerse allí del todo sobre mí y conmigo, hasta el final -¿es algo que me honra?-, con el pus y la carne llena de gusanos de su lengua junto a mi mano.
|
Aforismos de Franz Kafka
Analízate en relación con la humanidad. A los que dudan les hace dudar, a los que creen les hace creer.
|
|
Gregorio Samsa es un ...