El destramador de maldiciones de Frances Hardinge
La dulzura a veces se confunde con la debilidad, pero no son ni siquiera primas hermanas.
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El destramador de maldiciones de Frances Hardinge
La dulzura a veces se confunde con la debilidad, pero no son ni siquiera primas hermanas.
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El destramador de maldiciones de Frances Hardinge
Todos tenemos anclas, pero las cuerdas se rompen una tras otra. Sientes el latigazo en tu corazón. Sabes que irás a la deriva cuando llegue la tormenta. Y a veces tienes que soltar tu mismo la última ancla.
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El destramador de maldiciones de Frances Hardinge
No lleves hierro. No dañes los árboles ni rompas el suelo sin su permiso. Y trae un regalo por si acaso te lo piden.
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La canción del cuco de Frances Hardinge
iss rememoró una gélida oscuridad, el agua fría llenándole la nariz, la boca y la garganta. Creyó recordar que había mirado hacia arriba a través de unas tinieblas pardas y cambiantes, mientras sus piernas se agitaban despacio. |
La canción del cuco de Frances Hardinge
Triss rememoró una gélida oscuridad, el agua fría llenándole la nariz, la boca y la garganta. Creyó recordar que había mirado hacia arriba a través de unas tinieblas pardas y cambiantes, mientras sus piernas se agitaban despacio |
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