La poseia flamenca de Felix Grande
Hay letras que escribieron para el cante poetas como los Machado, otras que no fueron concebidas por sus autores para el flamenco pero las han cantado como es el caso de poemas de Miguel Hernández, San Juan de la Cruz o Ibn Arabí. También se cantan por estilos mineros las quintillas de los troveros. Hay inspirados versos que salieron de las bocas desdentadas de los hijos de la miseria pero que bien pudieran haber sido escritos por autores cultos, incluso poetas orientales: “En la torre está el reló. El mochuelo en el olivo. En mi corazón, la pena …Cada cosa está en su sitio”. A veces no sabemos distinguir la autoría, si es anónima del pueblo o lleva firma culta. |