La ciudad de la piel de plata de Félix G. Modroño
El amor es un eterno insatisfecho, a diferencia del deseo, que muere al satisfacerse.
|
La ciudad de la piel de plata de Félix G. Modroño
El amor es un eterno insatisfecho, a diferencia del deseo, que muere al satisfacerse.
|
Sol de brujas de Félix G. Modroño
La vida es demasiado imprevista como para una se despiste exhibiendo el sufrimiento por algo que no puede cambiar
|
La ciudad del alma dormida de Félix G. Modroño
Ocupación o liberación. Dos maneras antagónicas de referirse a un mismo hecho según la ideología del narrador. Cuando se escribe la historia sin concederle la perspectiva del tiempo, los cronistas nunca son justos con los vencidos, a quienes se les inflige el doloroso castigo del silencio, antesala del olvido.
|
La ciudad del alma dormida de Félix G. Modroño
La vida no solo era demasiado corta, sino que en época de guerra resultaba además impredecible
|
La ciudad de los ojos grises de Félix G. Modroño
No hay peor soledad que la que se siente acompañado
|
Secretos del Arenal de Félix G. Modroño
La tecnología ha facilitado la forma de relacionarnos con los demás, a costa de menoscabar la comunicación profunda con nosotros mismos.
|
La ciudad de los ojos grises de Félix G. Modroño
Quizás, le resultase imposible tratar de contener la hemorragia de nostalgia derramada a base de vendas impregnadas de ayer
|
La ciudad de la piel de plata de Félix G. Modroño
El amor es un eterno insatisfecho, a diferencia del deseo, que muere al satisfacerse
|
La ciudad del alma dormida de Félix G. Modroño
Los recuerdos más preciados son los que se llevan en el corazón
|
La ciudad de los ojos grises de Félix G. Modroño
Es muy triste pasar por los lugares sin conocer toda la historia que atesoran
|
La ciudad de los ojos grises de Félix G. Modroño
Es imposible ser intelectual y tener un pensamiento único. Supongo que es más sabio, quien más duda. Y es que las ideas no son solo blancas o negras; por eso, no se debe desdeñar la amplia gama de grises que configura nuestro pensar
|
La ciudad de los ojos grises de Félix G. Modroño
De niño, uno disfruta de los años en los que el tiempo parece no existir, sin imaginarse que pueda llegar a agotarse antes de empezar a sentirse viejo
|
La ciudad de los ojos grises de Félix G. Modroño
Penso q todos lo hombres, al igual q las sociedades, deberían tener la oportunidad de volver al punto en que se equivocaron para poder corregir sus errores
|
La ciudad de los ojos grises de Félix G. Modroño
Maldecía el progreso y la perdida de valores que acarreaba, pero no podía imaginarse su vida sin los trenes. Trenes que utilizaba para viajar en su constante huida de sí mismo
|
La ciudad de los ojos grises de Félix G. Modroño
aunque ahora acumulaba las suficientes cicatrices como para admitir un nuevo rechazo
|
La ciudad de los ojos grises de Félix G. Modroño
un andén con un tren a punto de arrancar es un lugar lleno de ánimos alterados, de personas abstraídas en una partida, de añoranzas y esperanzas desparramadas por las vías". Y el remate de la frase me gusta: "la maleta de su vida se encontraba llena de adioses: adioses necesarios, adioses ineludibles, adioses fortuitos
|
La ciudad de los ojos grises de Félix G. Modroño
Alfredo salió de la habitación hastiado de recuerdos pero con el alma erosionada por torrentes de tristeza y vientos cargados de vacío
|
La ciudad de los ojos grises de Félix G. Modroño
Unos versos que se habrían borrado de la arena, pero que perdurarían indelebles en la playa de los recuerdos
|
La ciudad de los ojos grises de Félix G. Modroño
La mejor manera de librarse de una tentación era la de caer en ella
|
La ciudad de los ojos grises de Félix G. Modroño
no existe nada como un reloj parado ante el mar o ante el fuego para encontrarse a uno mismo
|
Novela de ciencia ficción, escrita por Richard Matheson, en 1975 se titula: "En algún lugar del _________"