El judío errante de Eugène Sue
[...] jama haré juramento de cumplir una ley hecha por el hombre "contra" la mujer con un egoísmo desdeñoso y brutal; una ley que no sabría aceptar sin ser esclava o perjura; una ley que "doncella" la retira su nombre; "esposa" la declaración al estado de imbecilidad incurable, imponiendola una tutela degradante; "madre" la quita todo derecho, todo poder, sobre sus hijos, y "criatura humana" , en fin, la avasalla, la encadena para siempre al buen placer de otra criatura humana, su semejante y su igual ante Dios. [...] No, jamás haré juramento de observar una ley que mi dignidad y mi razón rechazan [...]
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