La otra orilla de Elena Moya
La pequeña disfrutaba aprendiendo; se sentía mayor porque a medida que sabía más, todo lo resultaba más fácil y pequeño. Pronto aprendió que el saber le daba control.
|
La otra orilla de Elena Moya
La pequeña disfrutaba aprendiendo; se sentía mayor porque a medida que sabía más, todo lo resultaba más fácil y pequeño. Pronto aprendió que el saber le daba control.
|