Damisela de Elana K. Arnold
Escucho la rabia en el rugido, pero sus oidos no percibian toda la verdad. Porque no escucho la angustia del dragon. No escucho su pena. No considero la razon por la que la bestia habria dejado caer la cabeza, cerrando los ojos. Lo unico que vio fue un enemigo y una oportunidad
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