Los hombres tienen miedo a la luz de Douglas Kennedy
Había entrado en la rueda del sistema, como la mayoría de nosotros lo habíamos hecho: la casa hipotecada, una familia, el coche arrendado, la deuda de la tarjeta de crédito... Todo ello mientras se prometía esquivar los compromisos y las limitaciones que traen consigo las responsabilidades intrínsecas de la vida adulta. Cuando la realidad es que cedemos porque nos convencemos de que lo contrario es no hacer aquello para lo que fuimos educa-dos: ceder. Mi historia y la de tantos otros. |