El botones de Kabul de David Jiménez
Los hombres tienen la mala costumbre de confundir humildad con debilidad y bondad con docilidad.
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Calificación promedio: 5 (sobre 18 calificaciones)
/Nuria Richart y José María Marco entrevistan al escritor David Jiménez por su nuevo libro La palabra ambigua' (Ed. Taurus) #LibertadDigital #Noticias #literatura #libro Suscríbete al canal oficial de Libertad Digital en YouTube: https://www.youtube.com/user/LibertadDigital Visita nuestra web: https://www.libertaddigital.com/ Y síguenos en nuestras redes sociales Facebook: https://es-es.facebook.com/libertad.digital/ Twitter: https://twitter.com/libertaddigital Instagram: https://www.instagram.com/libertaddigital_/
El botones de Kabul de David Jiménez
Los hombres tienen la mala costumbre de confundir humildad con debilidad y bondad con docilidad.
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Los diarios del opio de David Jiménez
Filipinas es mi jardín, el libro en el que Manuel Leguineche retrata un país atrapado en el absurdo, está lleno de anécdotas sobre lo que durante décadas fue conocido simplemente como el Hotel de Oriente. Todo, desde los gol-pes de Estado hasta los negocios más turbios, desde las bodas de la elite hasta la proclamación de dictaduras, se cocinaba bajo sus lámparas en forma de «arañas resplandecientes».
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Los diarios del opio de David Jiménez
Mientras haya nuevos mundos por conquistar, el samurai japonés se apoderará de ellos.
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El corresponsal de David Jiménez
Podría arder el mundo a tu alrededor y no escogerías otro lugar para contemplar su final
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Los diarios del opio de David Jiménez
Kipling añade a su adicción a las drogas noches de sexo con las prostitutas de Lahore y confiesa a un amigo que abandonar su nueva vida le sería tan difícil como renunciar a la escritura. Experimenta para escribir. Escribe para experimentar. Deja para la posteridad una definición de la prostitución que se universalizaría y que sigue siendo utilizada en las crónicas de prensa de los reporteros poco originales: “La profesión más antigua del mundo”.
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Los diarios del opio de David Jiménez
Maugham y Bangkok estaban hechos el uno para el otro: la bisexualidad del escritor y la ambigüedad de la capital tailandesa; el afán de vivir sin ser juzgado y un lugar que no juzga; la búsqueda del perfeccionismo y la belleza de la imperfección; la tolerancia, en fin, de un destino que tiene la habilidad de transformarse en lo que el visitante quiera o necesite de él.
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Los diarios del opio de David Jiménez
Conrad, al contrario que Maugham, era un moralista con gran sentido de la justicia. Mientras el autor de El caballero del salón viaja por placer, en lo que fueron los orígenes del turismo tal como lo conocemos hoy, a Conrad le duelen las desigualdades de un mundo donde los fuertes utilizan su riqueza para oprimir y saquear a los pueblos más débiles.
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El botones de Kabul de David Jiménez
La guerra termina cuando ha dejado de herir. Cuando muere el odio que la provocó. Cuando se marcha la generación que ha luchado en ella y la generación que ha llorado a los caídos deja sitio a otra que solo los recuerda.
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Los diarios del opio de David Jiménez
Algunos de nosotros buscamos el Camino en el opio y otros en Dios, algunos en el whisky y otros en el amor. Es todo lo mismo y no conduce a ninguna parte.
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¿En qué época se desarrolla la historia?