La chica que susurraba a las vacas de Dara Meier
(…) Francamente, creo que hubiera sido mucho mejor para mí descubrir a un hombre egoísta, falto de intuición, torpe, cobarde... Pero por desgracia es todo lo contrario. Ha resultado que Hulk, don ego herido, don histérico o como le llame habitualmente, parece ser un hombre generoso, con gran inteligencia en mucho aspectos, tremendamente hábil, cabal, buen compañero, simpático... En resumen, todo lo que no me conviene que sea. Para rematar es guapo a rabiar y con un cuerpo que quita el hipo y los siete males. Genial, si salgo ilesa de ésta me mereceré un premio.
|