La chica nueva de Daniel Silva
—¿Puedes arreglarlo? —preguntó Macmillan. —¿El qué? —La visita privada a la Colección Al Bakari, claro. —Es mala idea, Jalid. —Eso mismo contestó mi padre cuando le dije que quería concederles a las mujeres de mi país el derecho a conducir. |