Trilogía del dolor de Daniel Mella
¿No hay veces que te das cuenta, mientras todo está pasando, que si quisieras podrías entregar todo, así, por completo? Y sos consciente cuando ponés marcha atrás unos metros. No es que no se pueda. Es que no queremos. Siempre un pedazo del corazón afuera. Y esa partecita siempre está sola, es la que hace todas las cagadas. Porque esa parte siempre precisa entregarse.
|