Yo, Muerte: Locura y Sangre de Celia Perea Cuevas
A su alrededor imperaba la confusión. Luces multicolores cegaban su sesgada perspectiva. Percibió el calor en su mano, el tacto suave de unos deditos pequeños, agarrándola fuerte e intentando hacerla retroceder. Fue un segundo, un paso. Sin poder evitarlo aquel vínculo se rompió quebrando su alma en el proceso.
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