Cees Nooteboom: “No es viable que un Gobierno trabaje contra la mitad de la población”
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Cees Nooteboom: “No es viable que un Gobierno trabaje contra la mitad de la población”
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533 días, vertido claramente al castellano por Isabel-Clara Lorda Vidal, es una crónica autobiográfica (la forma literaria más reconocida de la transubstanciación) en la que nos cuenta un año y medio de meditaciones, lecturas, descubrimientos y coincidencias
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Cees Nooteboom ha escrito un diario que resista el paso del tiempo, alejado de la tentación de las emociones, la confesión, el descargo de conciencia, las diversas sinceridades y emotividades privadas, «sandeces» las tilda él, que socavan la intención de perdurabilidad que, en el fondo, siempre busca este tipo de páginas.
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Una servilleta donde figura el nombre de Poseidón escrito en letras azules en un restaurante elegido al azar en Múnich, supone el desencadenante para que el autor escriba unas cartas breves al dios, que versan sobre su vida y sobre lo que ve, oye y piensa. Es una especie de cuaderno de notas cuyo título se justifica, ya que Cees Nooteboom dirige a uno de los grandes dioses de la antigüedad, una serie de misivas y observaciones, desde el presente. Poseidón le sirve al autor, como destinatario para reflejar lo que le conmueve en su vida, lo que piensa sobre los dioses, sobre los mitos y también sus interrogaciones retóricas, retazos de experiencia o instantáneas de sus viajes.“Voy dejando mis cartas en la playa, sobre una roca que hay junto al mar, con las esperanza de que tú las encuentres”, le dice a Poseidón “te escribiré sobre cosas que leo, veo y pienso. Historias que imagino, que me vienen a la memoria, que me sorprenden. Noticias del mundo” Son en total, veintitrés cartas dirigidas directamente al dios, a la rencorosa divinidad que impuso a Ulises su Odisea, y cincuenta y tres notas en las que le cuenta cosas de lo que vive o ve, complementadas con notas e imágenes al final del libro. Una lectura, erudita, productiva y también entretenida, llena de datos interesantes, cultura clásica, también literatura, anécdotas y detalles, además de opiniones personales sobre religión, política, ciencia, sociedad y cultura. Predomina lo autobiográfico sin que falte la evocación fantástica. Tardó cuatro años en escribirlo, pero una vez finalizada la tarea, Nooteboom la evoca con felicidad: "Fue un enorme placer escribir este libro. Recuerdo haber estado en Buenos Aires, sentado en el café El Hipopótamo, pensando que iría a casa, mi departamento en la calle Azcuénaga, y le escribiría a Poseidón sobre ese lugar (y así lo hace, hay una descripción de el hipopótamo, el café favorito del autor en Buenos Aires) y que, siendo un dios con todos los privilegios que eso conlleva, él sería capaz del ir a El Hipopótamo y sentarse a una mesa sin que nadie lo viera. La vida es un juego, y entonces lo veo sentado allí, con tridente y todo, empapado, mientras le sirven un café negro ." A partir de esta lectura me he interesado por otras obras de este escritor holandés que he leído y me han gustado mucho. Una lectura interesante, inteligente y muy productiva. + Leer más |
El gran escritor holandés Cees Nooteboom nos presenta una original y excelente obra, en la que va a recorrer varios museos y palacios del mundo, buscando la belleza, las formas, los colores, y capturar su grandeza en las magníficas obras pictóricas con las que dialoga para, recurriendo a su imaginación, exponer lo que de ellas recibe. Nos encontramos, por tanto, ante un extraordinario ensayo en varios capítulos, trece, concretamente, sobre la percepción del mundo de la pintura, con una mirada intensa y profunda, que va mucho más allá de la superficie del cuadro. Y en el que también podemos admirar algunas imágenes de los cuadros comentados. Interesantísimo libro que nos lleva a descubrir los enigmas que contiene toda obra artística, también nos induce a investigar, a intentar conocer y mirar más y mejor y, sobre todo, a plantearnos grandes interrogantes sobre el arte y las obras, invitándonos a la reflexión y al análisis. Un observador clarividente y privilegiado . No sólo mira, sino que escucha las historias que cuentan las pinturas. ¡Qué maravilla! y nosotros lo acompañamos con entusiasmo y recibimos sus importantes explicaciones que a mí , particularmente, me han parecido excepcionales. Los enigmas y el manejo de la luz en Hopper y Vermeer o de los grabados y los frescos de Tiépolo, la naturaleza de Leonardo da Vinci, el milagro de la pintura de Piero Della Francesca en Arezzo, el autorretrato de Rembrandt, los paisajes de Bruegel, los rostros sin ojos De Chirico, el lado oscuro de la pintura de Friedrich y sus laberintos de niebla o las soledades urbanas de Hopper. Además de los bronces de Riace, que datan del siglo V a. C y fueron rescatados del mar Jónico en el año 1972 y los seis tapices del siglo XV, la dama y el unicornio, que representan los cinco sentidos y un misterio, del museo de Cluny en París. Es la narración de un viaje a través de museos, iglesias y palacios del mundo en busca de la belleza y el simbolismo de las pinturas, con la intuición del “voyeur”, según el mismo autor escribe en la obra: “un poeta que ama a un pintor no puede remediar ver los cuadros de este como seres vivos, como personas, incluso, o, cuanto menos, como objetos con un universo propio que el cuadro permite visualizar”. También recurre a una extensa bibliografía y lo que tenemos, es una guía ideal e inteligente para el viajero que quiera aprender a extraviarse, como los grandes aventureros, por los diferentes lugares y recintos donde se ubican las obras e incluso por las mismas obras artísticas. Es un viaje por el arte, como indica ya en el título, por ciudades, museos, artistas y grandes obras en busca de la belleza, que también nos dan cuenta de la relación afectiva que une las obras a la ciudad donde se ubican. Y leerlo nos ofrece una nueva forma de admirar y disfrutar de las fabulosas obras del arte, de los museos y de sus ciudades. El mundo está lleno de maravillas, y deseamos acudir a ellas, entrar y soñar. Ahora cuando visito y admiro una obra de arte lo hago a la manera de Cees Nooteboom. Veo la imagen, la observo con atención y detenimiento, también con curiosidad y con el deseo de conocer y saber. ¿Y cuál es el resultado? Pues un mayor conocimiento de todos aquellos detalles que, aunque estaban a la vista, se nos habían escapado. A partir de ahora, todo se quedará conmigo. Un precioso libro, lleno de iluminaciones, un espléndido paseo literario para acercarnos al arte. Una travesía brillante que deseo compartir. ¿Me acompañas? Vamos al museo y no solo a contemplar la belleza, sino también a escuchar sus diálogos. Descúbrelo. Absolutamente recomendable. + Leer más |
Es un libro de cuentos cortos contados a través de diferentes personajes, pero yo sentí como si fuera la misma persona quién narra todos, sentí una mínima diferencia entre ellos, a excepción de Paula II. Tal vez si lo leyera en su idioma original podría sentir la diferencia de matices, pero pues no hablo holandés, así que pues lo dejo en 3 estrellas. Si el autor quiso impregnar de tristeza cada relato lo logro muy bien, en cada uno se siente la melancolía atrapada en sus personajes.
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Gregorio Samsa es un ...