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El desorden que dejas de Carlos Montero
Los tiempos difíciles son el mejor terreno abonado para que germine cualquier acto miserable.
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El desorden que dejas de Carlos Montero
Todos los horrores posibles que eres capaz de imaginar, alguien ya los cometió.
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El desorden que dejas de Carlos Montero
La literatura ayuda a pensar, a imaginar lo imposible, a creer que se puede.
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El desorden que dejas de Carlos Montero
Lo "de su padre" no es otra cosa que su muerte. Qué curiosos los eufemismos y todos los esfuerzos que hacemos para eludir a la muerte de la vida, y hasta del lenguaje. Lo de su padre.
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El desorden que dejas de Carlos Montero
Pocos veranos saben tan bien como en los que en plena adolescencia despertamos a la vida y al deseo.
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El desorden que dejas de Carlos Montero
¿Cómo puede ser que sea más terrible de lo que imaginaste y a la vez que no sea para tanto?
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El desorden que dejas de Carlos Montero
Intenta una sonrisa. Y esa sonrisa es como si se hiciera paso a través de una tristeza infinita. Noto el esfuerzo titánico que para él supone sonreír.
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El desorden que dejas de Carlos Montero
Como cuando eras pequeña y esperabas en secreto que llegara septiembre para empezar el curso. Ese olor a libro recién estrenado era tan maravilloso como partir una barra de pan apenas sacada del horno. Olores embriagadores. Los mejores del mundo
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El desorden que dejas de Carlos Montero
Ella es el mejor antídoto para mis raptos de melancolía absurdos.
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El desorden que dejas de Carlos Montero
El miedo a la ausencia muchas veces es más terrible y más paralizante que la ausencia en sí
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El desorden que dejas de Carlos Montero
La literatura ayuda a comprendernos, a empatizar, y cuando no, al menos nos acompaña en el camino.
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El desorden que dejas de Carlos Montero
Ya no puedes volver a recuperar lo que eras, porque ya has enseñado el monstruo que habita dentro de ti, y has visto el monstruo que hay en el otro. Y nadie quiere convivir con monstruos.
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El desorden que dejas de Carlos Montero
Los tiempos difíciles son el mejor terreno abonado para que germine cualquier acto miserable.
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El desorden que dejas de Carlos Montero
Iago prefirió no contestarle, sus chanchullos raros, como decía Nerea, se los guardaba para el, menudo era para guardar secretos. Cuando quería se convertía en el tío más hermético del mundo. Desde pequeño había aprendido que eso era lo más sensato. "Cuanto menos sepan fuera, mejor", le decía su padre. Y lo llevaba tan a rajatabla que a veces de tanto esconderlo hasta se lo acababa ocultando a sí mismo. Sin duda era su mejor armadura para sobrevivir, sobre todo en días como este, cuando los remordimientos, la culpa y sobre todo la pena le asolaban.
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El desorden que dejas de Carlos Montero
El miedo a la ausencia muchas veces es más terrible y paralizante que el sentimiento en sí.
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El desorden que dejas de Carlos Montero
Los chavales ahora vendrán equipados con móviles de última generación, con iPads con conexión 4G, pero las excusas siguen siendo las de toda la vida.
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El desorden que dejas de Carlos Montero
A lo mejor me quemo si sigo empeñada en agarrarme a un clavo ardiendo.
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El desorden que dejas de Carlos Montero
En algún lado leí que las causas que provocan más estrés, ordenadas de mayor a menor, son: la muerte de un ser querido, una ruptura amorosa y una mudanza.
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El desorden que dejas de Carlos Montero
Todos los horrores posibles que uno es capaz de imaginar, alguien ya los cometió.
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¿Con qué frase empieza esta novela?