Drácula de Bram Stoker
Había empeño en su rostro, como si fuera consciente de estar cumpliendo un deber sagrado, y el contemplarle nos infundió valor, de modo que nuestras voces parecieron resonar en la pequeña cripta.
|
Drácula de Bram Stoker
Había empeño en su rostro, como si fuera consciente de estar cumpliendo un deber sagrado, y el contemplarle nos infundió valor, de modo que nuestras voces parecieron resonar en la pequeña cripta.
|