La hierba roja de Boris Vian
Sabe usted, a mí el catecismo apenas me rozó... tal como fui educado, era imposible que creyera. Todo se reducía una formalidad necesaria para conseguir un reloj de oro y no tener dificultades para casarse.
|
La hierba roja de Boris Vian
Sabe usted, a mí el catecismo apenas me rozó... tal como fui educado, era imposible que creyera. Todo se reducía una formalidad necesaria para conseguir un reloj de oro y no tener dificultades para casarse.
|