Beatriz Arias

A veces, por las circunstancias de la vida, no quedaba más remedio que aparentar ser fuerte, aunque por dentro estuvieses roto. Para ojos extraños, uno es lo que aparenta ser...

Hay batallas que solo dejan heridas visibles... Pero las heridas de verdad son las otras. Las que no se ven. Las que se llevan en secreto. Esas son las que lo explican todo; pero, de esas, nadie habla.

No digas que tus sueños están rotos, solo porque aún no los hayas cumplidos todos. No dejes de soñar, pequeña, tú has nacido para brillar.

Experta en reír por fuera y llorar por dentro, se acostumbró a dormir sin abrazos, a hacerse cargo de sus líos y a juntar sus pedazos.