Las primas de Aurora Venturini
digo repitiendo a quienes tengan ocasión de leerme y paciencia al mismo tiempo porque yo misma me oigo y si la palabra escrita es tan fatigantemente bobalicona como la hablada por mí hacia adentro, quien termine esta melopea absurda me maldecirá por el tiempo que le hice perder sin poder negar que no pudo dejarme a un lado porque encontró entre mis estúpidas amarguras de amor y muerte muchas de las vividas por sí mismo o misma si se trata de una dama.
|