Una furia de alas negras de ALEX LONDON
Un halcón que habías cuidado durante doce temporadas podía volar lejos de ti en cualquier momento. Cuando soltabas el amarre y lo dejabas volar, confiabas el halcón al mundo y tenías la esperanza de que el mundo lo devolviera ileso. Las personas no eran tan diferentes. A veces se iban y no volvían más.
|