Tres mujeres de Tarryn Fisher
-Me muero de ganas de verte. Llevo todo el día distraído en el trabajo pensando en esta noche. —¿Vendrás aquí o voy yo? —pregunto. —Quedamos mejor allí. ¿Has traído ese vestido negro que tanto me gusta? —Claro —digo, sonriendo un poco. La mayoría de los días sigo sintiendo mariposas en el estómago cuando oigo su voz por teléfono. |