La ridícula idea de no volver a verte de Rosa Montero
... con los años, tengo la creciente sensación de que hay una contínuidad en la mente humana ; de que, en efecto, existe un inconsciente colectivo que nos entreteje, como si fuerámos cardúmenes de apretados pecen que danzan al unísono sin saberlo. Y las coincidencias forman parte de esa danza, de ese todo, de esa música, de esa canción común que no conseguimos terminar de escuchar porque el viento sólo nos trae notas aisladas.
|