Dionisíacas. Cantos I-XII: 1 de Nono de Panópolis
Madre mía ¿qué has sufrido por mí, para que desdeñes a tu hija? ¿Así la unes a un mortal recién venido? ¿Qué dote podrá ofrecerme alguna ve un marinero? ¿O acaso me concederá, como regalo de bodas, las amarras de su nave? |